- Ingredientes
- 500 g de almejas
- 4 dientes de ajo
- medio vaso de vino blanco
- 1 cucharada de harina
- aceite de oliva
- perejil
- sal
- agua
Primero ponemos las almejas en una cazuela con agua y abundante sal para que se abran y suelten toda la arena.
De mientras en una sartén grande u otra cazuela bajita ponemos bastante aceite. Picamos los dientes de ajo y los sofreimos en la satrén. Cuando estén doraditos añadimos la harina, la doramos un poquitin y añadimos el vino sin dejar e remover. A continuación incorporamos el agua removiendo hasta conseguir la consistencia que nos guste de salsa. Dejamos unos minutos cociendo. Y por ultimo añadimos el perejil.
La salsa se puede dejar hecha unas horas antes y cuando se vayan a comer, se pone alfuego a calentar. Una vez caliente se añaden las almejas escurridas y cuando empiecen a abrirse se retiran. Yo como eran bastante grandes una vez que se iban abriendo las retiraba a una fuente hasta que se abrieron todas.
Cuando ya estén todas abiertas las servimos junto con la salsa.
Cuando ya estén todas abiertas las servimos junto con la salsa.
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